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CS-255-Martyniuk.Parcial Historia

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Líneas añadidas 1-188:
I. Una presente en los exponentes del positivismo es la de la
neutralidad, en a los valores, de la actividad y (en tanto que
de la ciencia). Este es un punto que presenta especial relevancia a la luz de
los aportes de Hebert Marcuse y de Martin Heidegger.

Marcuse problematiza este concepto al plantear que, en las sociedades
modernas, la estructura racional tiene profundas consecuencias :
lejos de una neutralidad objetiva, su desarrollo el modelo de la
vigente en estas sociedades. En efecto, la de estructuras al
mundo condujo a una en la que se al mundo de las motivaciones
relacionadas con las causas finales, imperando en la ciencia un total por estas
. En este punto, coincide con el de Heidegger acerca de la del
dominio de la causa, que dividido en cuatro momentos. Esta
no es producto de una particular de los conocimientos sino que,
Marcuse, la de este estaba inscripta ya en la ciencia pura. Al
tiempo que la se desarrolla, el dominio de los valores se presenta cada vez
aislado de la realidad del mundo, y se lo llega a ignorar por no .
Pero en los casos en los que se tienen en cuenta, su de las causas
eficientes tienden a hacerlo subjetivo e inefectivo, a alejarlo de la realidad al tiempo que
se eleva sobre ella. La realidad instrumental que se construye entonces, excluyendo
voluntariamente toda pregunta por la esencia de los , llega a negar al sujeto
humano: conspira contra todo pensamiento no , y puede independizarse de
a de su fundamental. Esta a una Lebenswelt plantea
un problema para el desarrollo de la ciencia, en el caso de mostrarse incapaz de cambiar
su forma de pensar las relaciones de los hombres entre y con la naturaleza.

Es donde, para Heidegger, reside el mayor peligro del pensamiento .
En efecto, la en no ser repudiada en su conjunto: pero se
preguntarse acerca del efecto que el modo de pensar , que tiene a reducir a la
naturaleza a una mera reserva o de materiales para la actividad humana. Lo que
existe lo hace para ser consumido: todo es reemplazable. Esta forma del pensamiento
tiende a igualar todas las instancias del mundo material. De este modo los objetos
pierden su de tales; se frente a ellos de otra forma. Marcuse dice al
respecto que el objeto, al ser sostenido como una propia del sentido ,
lleva a una idealista de la realidad. Esto lo lleva a problematizar el concepto
popperiano de la en la ciencia, cuyo futuro incierto al proceder
exclusivamente descartando regularmente secciones del conocimiento. Pero la
de la realidad adquiere bastante particulares.
Marcuse cita entonces una de la materia como posible objeto de la
del : puede verse como la neutralidad valorativa de la ciencia
conlleva en realidad un contenido a priori de valores acerca de la . Esta
actitud hacia el mundo, este proyecto a la vez y social es anterior,
hablando, al desarrollo de la . La de estructuras
a la realidad definidas como exactas crea la de un conocimiento
objetivo: pero estos no se limitan a expresar la realidad, sino que asimismo la
enmascaran.

La transferencia de la neutralidad valorativa concedida a la ciencia hacia la
produce, para este autor, consecuencias inmensas, teniendo en cuenta,
por un lado, la universalidad de la , pero, , la
entre las y las cotidianas regidas por la . Heidegger
el peligro de la del sujeto humano, que merced a la
del pensamiento puede quedar atrapado en el pensamiento
propio de la esencia de la . Marcuse este mismo problema al afirmar que
la forma en la que se racionaliza la no utiliza a la como
intermediario, sino que es en misma . La pretendida objetividad sirve
a una subjetividad cuyos fines claramente definidos. Sus exponentes positivistas
cumplen una , que este autor califica como de los hechos
sociales. Heidegger piensa la del pensamiento calculador como una
decadencia peligrosa. Sugiere no afirma - que el arte es una de las
posibles para recuperar los significados dejados afuera por el pensamiento que
expresaron, entre otros, los principales del positivismo.

II. La postura desarrollada por Schutz construida, en gran parte,
como una respuesta a la que Ernest Nagel realiza al pensamiento de Max Weber
sobre las ciencias sociales. Nagel critica a Weber, desde una cercana al
positivismo y que sostiene que las ciencias usar los modelos de las ciencias
naturales. Reacciona ante el hecho de que los procesos que analiza no sean
datos observables directamente, tildando el autor, - el concepto
weberiano de de incontrolable y de cercano a la .
Schutz plantea entonces que la debe ser directamente sensorial
(permitiendo conservar para el que propone el de verificable) y que la
menor predictividad que existe en las ciencias sociales en a las naturales no
invalida sus resultados. Un sistema basado en los valores particulares del investigador, y
a su subjetiva con los individuos o grupos estudiados, en la del
autor, condenado al fracaso por apelar a instancias no verificables; pero este
sistema no el de Max Weber.

Para sostener esta postura, el autor concibe y explica una serie de proposiciones
interconectadas que expresan su particular del problema de la de la
con las ciencias sociales, en general, y en particular su lectura del trabajo de
Weber. Pensamos que comparte con una relacionada principalmente
con el , pero con el objeto de estudio de las ciencias sociales. La
del autor sobre este problema, junto con la de Max Weber, puede pensarse dentro de
una que ser denominada comprensivista, en tanto que estudia no
los hechos ejemplo, la conducta de los diferentes actores sociales- sino,
principalmente, las representaciones individuales, esto es, el valor y el
significado que los actores atribuyen a la . Schutz hereda de Husserl su
por el de la intersubjetividad. Una propia entre estas
tradiciones lo lleva a postular el pensamiento de los actores sociales como el principal
objeto de estudio de las ciencias sociales. Es necesario entonces no considerar estos
elementos como dados, y no presuponer resuelto este problema central. Cada actor,
reconoce el autor, no puede comprender la y subjetiva de los otros
actores en lo que tiene de . Puede, sin embargo este es un hecho muy
relevante para la de sociales- en lo que tienen de
, esto es, en lo que los une a una multitud de otras experiencias similares. El
social no entonces limitarse a tomar estas representaciones de primer
grado, sino que construir en base a ellas unas representaciones de segundo grado
de sus intereses y humanos, y adoptando un en precisar
las descripciones y sostener tanto la consistencia como la
con el observado. El objeto de estudio no limitado a los problemas
subjetivos de los actores sociales, sino que determinado por la ciencia misma.

Lo que diferencia a las ciencias sociales de las naturales, entonces, no es una
diferencia en sus ni una absoluta incompatibilidad . La
radica entonces en que los actores de la realidad social, a diferencia de los de
la realidad puramente , interpretan y otorgan sentido al mundo en el que habitan.
La mera conductista de la realidad social se desliga completamente de
este problema; en consecuencia, sus conclusiones forzosamente limitadas. El
propuesto para las ciencias sociales, por el contrario, parte de las
representaciones construidas en la experiencia cotidiana, en la Verstehen; esta es la base
para la de los tipos ideales como medio de de la realidad
social. En efecto, esta herramienta permite cumplir a la vez la exigencia de pensar el
sentido subjetivo que los actores sociales construyen, y de mantener el objetivo
y verificable de sus experiencias. Schutz considera como medios el uso de
, y de otras formulaciones para las leyes de las ciencias sociales, siempre que
supusieran previamente que la actividad del individuo cargada de sentido.

El autor postula entonces una fuerte identidad entre el estudiado y los
que se emplean para su estudio. Este es el principal sentido de su de
que las ciencias sociales satisfacen el principio de continuidad. Es en virtud de esta
circunstancia que Schutz defiende la de las ciencias sociales,
que no debe abandonar su especificidad para buscar una unidad empobrecedora con las
ciencias naturales sino que, ampliando los posibles para la ciencia, puede
proporcionar las bases para una y del estudio general del
conocimiento.

III.La postura de Foucault parte de la pregunta acerca de se constituyeron
conjuntos de conocimientos a partir de ciertas sociales. El tema a analizar es
, de forma inversa a lo que diversas tradiciones de pensamiento (entre ellas el
llamado , como numerosos ejemplos provenientes de la
), estos campos de conocimiento decisivamente en la del
sujeto y, en particular del sujeto que conoce. Esta pregunta puede pensarse a la
influencia que los discursos. En efecto, las discursivas, en su enorme
variabilidad, permiten realizar una de valores y afirmar que la verdad que
ellos construyen no es absoluta sino y . Es en el seno de este proceso
que Foucault ubica el proceso de del sujeto.

El autor analiza la de la de los de a
del de las formas del derecho penal en particular, que dan origen a
construcciones calificadas como verdaderas, pero que son de un diferente a las
verdades . Pero este particular de las formas se relaciona con
un general de la sociedad que las produce: una sociedad de vigilancia y de
control y social como la del siglo XIX. Para pensar esta sociedad retoma el
pensamiento de Nietzsche, como un ejemplo valioso del tipo de
investigaciones a realizar. Foucault hace especial en mostrar, siguiendo a
Nietzsche, al conocimiento como una . En este punto polemiza con
las posturas relacionadas con la kantiana. Va lejos al sostener que el
origen del conocimiento no en ciertas facultades del hombre, sino en el proceso de
lucha de instintos que se y tuvo al conocimiento como resultado contingente.
Si bien el conocimiento es algo distinto de los instintos (e incluso contrario a ellos), no
puede reclamar para ninguna especial al objeto que conoce. La
que sostiene con el conocimiento, entonces, es una de violencia, de
. El garante de la del conocimiento y los objetos a
conocer era Dios. Al hacer innecesaria y , muestra el autor,
Nietzsche intenta separar completamente el de la del del
conocimiento. En este contexto puede pensarse nuevamente que Dios ha muerto.

Pero a esta ruptura otra: siendo el conocimiento incompatible con el
instinto, la integridad cartesiana del sujeto queda en tela de juicio. El sujeto no puede
sobrevivir como un todo y se escinde. Las reacciones instintivas lo llevan a buscar
alejarse del objeto, pero a de contraponerse entre en una lucha de poder. El
conocimiento se produce cuando los instintos consiguen llegar a un equilibrio inestable.
Foucault piensa entonces un nuevo abordaje al problema del conocimiento: pensarlo
desde su origen en las relaciones de lucha y de poder entre los individuos, en los juegos
en que inserto el hombre. Es en el de estos juegos, de estos
procesos de lucha, de estas relaciones de fuerza, que Foucault encuentra la base que los
cuerpos de saber apropiadamente denominadas disciplinas- y que constituyen, en
su , una herramienta fundamental de .

Esta de la nietzscheana del origen del conocimiento
permite entonces problematizar el problema que ya en las
concepciones corrientes del marxismo tradicional y . En efecto, si para
la en un proceso social de violencia sobre el conocimiento natural u
objetivo, que lo desviaba de sus modos de naturales, esta se vuelve
muy si se tiene en cuenta el permanente de la influencia de las
luchas sociales sobre la verdad. En realidad, para Foucault, estas luchas sociales
en el origen de la del conocimiento, y son las capaces de producir
descubrir- la verdad. estando inscrito estas condiciones del conflicto
puede constituirse el sujeto del conocimiento. Entonces, la forma que propone el autor
para analizar la del conocimiento pasa por estudiar estas condiciones ,
cuya forma cristalizada, esto es, estable, puede investigarse a partir del de
las formas . Pero este no un puramente , ya
que la de estas relaciones de poder, traducidas en saberes, que se formaron en
estas condiciones, siguen imperando en las sociedades . La forma
particular en que logran hacerlo es a del saber . Las
implicancias que tienen estas luchas para el de este saber son de proporciones
gigantescas.