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06 abril 2016 a las 01h46
por - Marx_La guerra civil en Francia
Líneas añadidas 1-94:
MARX, Karl
La guerra civil en Francia
Ediciones Pueblos Unidos. Montevideo (Uruguay), 1954, 121 pp.
(t.o.: in Frankreich)
CONTENIDO DE LA OBRA
se explica en nota a pie del texto, el presente volumen contiene las traducciones del folleto de 1871 ―cotejadas con la alemana de 1891― del Manifiesto del Consejo General de la Internacional de los Trabajadores sobre la Guerra Civil de 1871 en Francia, redactado por Marx, y complementado con un par de cortas y una carta publicada en la prensa. Incluye asimismo otros dos manifiestos del Consejo General de la Internacional de los Trabajadores, redactados por Marx, y una General de Engels escrita en 1891, aniversario de la Comuna de , para la de Guerra Civil en , publicada en en ese mismo .
DEL VOLUMEN
― de Engels, p. 7.
― Primer Manifiesto del Consejo General de la Internacional de los Trabajadores sobre la guerra francoprusiana, p. 27.
― Segundo Manifiesto del Consejo General de la Internacional de los Trabajadores sobre la guerra francoprusiana, p. 35.
― Manifiesto del Consejo General de la Internacional de los Trabajadores sobre la Guerra Civil en Francia en 1871, p. 47; I, p. 47; II, p. 62; III, p. 73; IV, p. 96; , p. 115.
DE ENGELS
En primer lugar explica por en la alemana de 1891 (ocurre lo mismo en la presente ) se incluyen los dos manifiestos, cortos, del Consejo General de, la Internacional de los Trabajadores sobre la guerra franco‑prusiana, precediendo al referente a La Guerra Civil en Francia. Dice que en La Guerra Civil se hace referencia al segundo de estos manifiestos, que, a su vez, no puede ser completamente comprendido sin conocer el primero (p. 7).
Tras dos breves alusiones a la internacional de Francia y Alemania, afirma: que estemos obligados a poner al alcance de los obreros alemanes estos brillantes documentos, hoy medio olvidados, de la profunda de la internacional de la clase obrera en (p. 9). (Recordamos que estos documentos fueron redactados, todos ellos, por Marx.)
El 28 de mayo de 1871 los luchadores de la Comuna; , el 30, Marx ya al Consejo General el texto del trabajo en que se esboza la de la Comuna de (p. 9).
En de Engels, gracias al desarrollo y de Francia desde 1789, la en desde hace cincuenta sido tal que no estallar en esta ciudad ninguna que no asumiese en seguida un (p. 9). por primera vez en (p. 10). Las discordias internas de la permitieron a Luis Bonaparte apoderarse de todos los puestos de mando, haciendo saltar la Asamblea Nacional el 2 de diciembre de 1851, comenzando el Segundo Imperio, de Francia por una cuadrilla de aventureros y financieros, pero , al mismo tiempo, un desarrollo industrial como hubiera podido concebirse bajo el sistema mezquino y asustadizo de Luis (p. 11).
Pero el Segundo Imperio era la de las fronteras del Primer Imperio, perdidas en 1814, o al menos las de la Primera , y nada deslumbraba a estos franceses que las tierras alemanas de la orilla izquierda del Rin. Proclamado el Segundo Imperio, la de este territorio simplemente una de tiempo. Y el tiempo con la guerra austro‑prusiana de . Defraudado en sus esperanzas de (p. 12), no le quedaba ahora salida que la guerra, que en 1870 y le primero a y a (p. 12). El 2 de septiembre de 1870, en , el fue derrotado y hecho prisionero, junto con el emperador. III fue internado en , cerca de Cassel.
Sigue una de Engels en la que se muestra decididamente su determinismo : consecuencia inevitable fue la de del 4 de septiembre de 1870. El Imperio se y nuevamente fue proclamada la . Pero el enemigo ―en este caso los alemanes― estaba a las puertas. Los del Imperio se encontraban sitiados en Metz, sin esperanza de , o prisioneros en Alemania. Los diputados parisinos del antiguo Cuerpo Legislativo se constituyeron en un Gobierno de Defensa Nacional. los parisinos capaces de las armas se enrolado en la Guardia Nacional y estaban armados, con lo cual los obreros representaban dentro de ella una gran . Pero el antagonismo entre el gobierno, formado casi exclusivamente por burgueses, y el proletariado en armas no en (p. 13), hasta tal punto que 31 de octubre de 1870 los batallones obreros tomaron por asalto el de Ville y capturaron a algunos miembros del (p. 13). Sin embargo, el 28 de enero de 1871 la ciudad de frente a los alemanes. Pero la Guardia Nacional sus armas y sus y se ―afirma Engels a sellar un armisticio con los vencedores, que ocuparon una zona de la ciudad (p. 14).
Thiers, nuevo jefe de gobierno, desarmar a la Guardia Nacional. El intento no . se para la resistencia (...) y se la guerra entre y el gobierno‑, instalado en (p. 14). El 26 de marzo fue elegida, y el 28 proclamada, la Comuna de . El Central de la Guardia Nacional, que hasta entonces tenido el poder en sus manos, en favor de la Comuna.
Engels describe a los primeros de de la Comuna: 30, la Comuna el servicio militar obligatorio y el permanente y fuerza armada a la Guardia Nacional, en la que enrolarse todos los ciudadanos capaces de las (p. 15). los pagos de alquiler de viviendas. El mismo 30 fueron confirmados en sus cargos los extranjeros elegidos para la Comuna, pues bandera de la Comuna es la bandera de la (p. 15). El 1 se acordaron los sueldos de los funcionarios de la Comuna. siguiente se la de la Iglesia y el Estado y la de todas las partidas consignadas en el presupuesto del Estado para fines religiosos, declarando propiedad nacional todos los bienes de la Iglesia; como consecuencia de esto, el 8 de abril se que se eliminasen de las escuelas todos los religiosos, , dogmas, oraciones; en una palabra, todo lo que cae dentro de la de la conciencia (p. 15). El 5 un decreto ordenando la de rehenes, pero esta nunca se a la (p. 15). Hay una curiosa con lo expresado dos adelante: las negociaciones, abiertas a propuesta de la Comuna, para canjear al arzobispo de y a toda una serie de , presos en la capital como rehenes ... , y con lo que dice Marx en el IV de Guerra Civil en : la por la Comuna de los sesenta y cuatro rehenes, con el arzobispo de a la cabeza? (p. 109). ... Comuna, para proteger sus vidas, viose obligada a recurrir a la prusiana de tomar (p. 109).
El 16 de abril se la apertura de un registro de las clausuradas por los patronos y la de planes para ser explotadas directamente por los obreros en forma cooperativa, formando con todas ellas una gran . El 30 de abril se la clausura de las casas de . El 16 de mayo fue demolida la columna de la , de (p. 16), como sido decidido el 12 de abril.
Sin embargo, afirma Engels, en una ciudad sitiada lo que se alcanzar era un comienzo de desarrollo de todas estas medidas. los primeros de mayo, la lucha contra los levantados por el Gobierno de Versalles, cada vez nutridos, todas las (p. 17). 21, gracias a una y por culpa del descuido de los guardias nacionales destacados en este sector, consiguieron (los versalleses) abrirse paso hacia el interior de la (p. 18).
A partir de este , Engels expone algunas ideas que considera deben sacarse como experiencia de aquellos acontecimientos. hoy, al cabo de veinte , volvemos los ojos a las actividades y a la de la Comuna de de 1871, advertimos la necesidad de completar un poco la que se hace en Guerra Civil en ... Los miembros de la Comuna estaban divididos en una integrada por los (p. 19) y compuesta por afiliados a la Internacional de los Trabajadores, entre los que los adeptos de la escuela socialista de (p. 19).
A , Engels critica severamente a los de los marxistas en la Comuna, proudhonianos y blanquistas. a los proudhonianos la principal responsabilidad por los decretos de la (p. 20); los blanquistas les incumbe la responsabilidad principal por los actos y las omisiones (p. 20). , en ambos casos, la de la historia quiso ―como acontece generalmente cuando el Poder cae en manos de doctrinarios― que tanto unos como otros hiciesen lo contrario de lo que la doctrina de su escuela respectiva (p. 20).
, el socialista de los campesinos y maestros artesanos, odiaba positivamente la (p. 20). Sin embargo, el decreto importante de cuantos la Comuna una que no se basaba en la del obrero dentro de cada , sino que unificar a todas estas asociaciones en una gran ; en resumen, en una que, como Marx dice muy bien en Guerra , forzosamente conducido en instancia al (p. 21). La idea expuesta por Engels ―los sindicatos llevan necesariamente al comunismo― es hoy totalmente indefendible. Lo que se puede aceptar ―y los hechos lo atestiguan― es que los sindicatos dirigidos por comunistas tienen como principal servirse de ellos como fuerza con vistas a acabar en el Poder e imponer el comunismo.
Engels poco : eso la Comuna fue la tumba de la escuela proudhoniana del (p. 21). fue mejor la suerte que corrieron los (p. 21). en la escuela de la y mantenidos en por la disciplina que esta escuela (p. 21), los blanquistas de la idea de que un grupo dominarlos a todos. llevaba consigo la y dictatorial de todos los poderes en manos del nuevo Gobierno (p. 22). Sin embargo, Comuna tuvo que reconocer desde el primer momento que la clase obrera, al llegar al Poder (...), tiene, de una parte, que barrer toda la vieja represiva utilizada hasta entonces contra ella, y, de otra parte, precaverse contra sus propios diputados y funcionarios, a todos, sin , revocables en cualquier (p. 22). todos los cargos administrativos, judiciales y de por , mediante sufragio universal, concediendo a los electores el derecho a revocar en todo momento a sus elegidos (p. 24).
Se trasluce la desconfianza de los marxistas para todos, para los propios . Comprendemos que esta mentalidad, llevada hasta sus consecuencias, significa el Estado policiaco, en el que todos vigilan a todos.
Finalmente, Engels se refiere a la del Estado en la sociedad socialista. Es un punto al que concede mucha relevancia. la , el Estado es la ' de la idea', o sea, traducido al lenguaje , el reino de Dios sobre la tierra, el campo en que se hacen o deben hacerse realidad la eterna verdad y la eterna justicia. De nace una supersticiosa del Estado y de todo lo que con se relaciona (...), y se cree haber dado un paso enormemente audaz con librarse de la fe en la hereditaria y entusiasmarse por la . En realidad, el Estado no es que una para la de una clase por (pp. 24‑25).
proletariado victorioso, lo mismo que hizo la Comuna, no por menos que amputar inmediatamente los lados peores de este mal (dictadura del proletariado) entre tanto que una futura, educada en condiciones sociales nuevas y libres, pueda deshacerse de todo ese trasto viejo del (p. 25). En pocas frases queda expuesta la marxista: dictadura del proletariado (con todo lo violenta, sangrienta y liberticida que esta dictadura ha sido y es en los donde se ha entronizado el marxismo) a la espera del estadio comunista en que el Estado desaparecido. Hoy, muchos de la de octubre en , comprobamos que esas generaciones futuras marxistas, lejos de abandonar ese viejo del , lo fortalecen, lo en sus atribuciones (siempre en perjuicio de la persona y de la libertad) y, en palabras de Engels, veneran cada vez .
PRIMER MANIFIESTO del Consejo General de la Internacional de los Trabajadores sobre la guerra francoprusiana.
Los obreros deben estar unidos y colaborar entre , por encima de las discordias y guerras nacionales (p. 27).
Esa es la idea que Marx, que desarrollar, intenta grabar. Para ello utiliza principalmente varios textos de resoluciones obreras.
El 19 de julio de 1870 la guerra franco‑prusiana. Con anterioridad, miembros parisinos de la Internacional puesto de nuevo manos a la (p. 29). En de 12 de julio , entre otras cosas: vez , bajo el pretexto del equilibrio europeo y del honor nacional, la paz del mundo se ve amenazada por las ambiciones . de Francia, de Alemania, de ! nuestras voces en un grito de contra la guerra! ... (pp. 29‑30).
la clase obrera alemana permite que la guerra actual pierda su estrictamente defensivo y degenere en una guerra contra el pueblo , el triunfo o la derrota igualmente (p. 32). los principios de la Internacional se hallan demasiado difundidos y demasiado firmemente arraigados entre la clase obrera alemana para tener atan lamentable (p 32). (El subrayado es nuestro.)
Y Marx, para fundamentar la anterior , que una asamblea celebrada en Brunswick el 16 de julio tele 1870 su absoluta solidaridad con el Manifiesto de y asimismo: enemigos de todas las guerras, pero sobre todo de las guerras ... (p. 32).
Hubo declaraciones similares en Chemnitz y , se expresa en este Manifiesto, del que se saca la que la clase obrera alemana la guerra ofensiva: tal es el de la clase obrera alemana, como parece desprenderse de este Manifiesto.
Marx hace una llamada de con respecto a Rusia: fondo de esta lucha suicida se alza la figura siniestra de (p. 33).
clase obrera inglesa tiende su mano fraternal a los obreros de Francia y Alemania (...), la alianza de los obreros de todos los por liquidar las guerras (...), surgiendo una sociedad nueva, cuyo principio de internacional la paz, porque el gobernante nacional el mismo en todos los : el trabajo. La precursora de esta sociedad nueva es la Internacional de los Trabajadores. Londres (23 de julio de 1870) (p. 34).
No resulta encuadrar estas afirmaciones con la lucha de clases.
SEGUNDO MANIFIESTO del Consejo General de la Internacional de los Trabajadores sobre la guerra franco‑prusiana.
Comienza Marx afirmando que si no se equivocaba (en el primer Manifiesto) al predecir el fin del Segundo Imperio, le faltaba al temer que la guerra alemana perdiese su estrictamente defensivo y degenerase en una guerra contra el pueblo (p. 34).
A demostrar el ofensivo de esta guerra dedicado este Manifiesto. Marx, sin embargo, no reconoce la derrota de la Internacional en su intento de evitar que la guerra se convirtiese en una guerra ofensiva contra el pueblo . En el primer Manifiesto ―como hemos visto― se daba casi como un hecho el de la obrera , enalteciendo el supuesto internacionalista de los obreros de los en conflicto, que una guerra contra el pueblo (cfr. p. 32). Sin embargo, nada de esto se cumple y los obreros de cada forman junto a sus connacionales en la empresa guerrera.
Veremos a intenta Marx justificar lo anterior, trasladando toda la a un campo tan lejano de los obreros alemanes, que resulta compaginarlo con el papel tan relevante que les daba en el primer Manifiesto.
su discurso de la Corona ante la Dieta de la Alemania del Norte, el rey declarado solemnemente que la guerra iba contra el emperador de Francia y no contra el pueblo (p. 36). eximirle de este compromiso solemne? Los directores de escena que presentarle como accediendo de mala gana a los mandatos irresistibles del pueblo (p. 37). los patriotas astutos reclaman Alsacia y la parte de la Lorena que habla , como una material contra las agresiones (p. 38).
Expresa Marx a que el sistema de nunca para evitar ataques de las naciones, lo que significa que, bajo esa capa, Alemania estaba aplicando una de (p. 40).
La clase obrera alemana ha apoyado la guerra, que no estaba en su mano impedir (clara con el primer Manifiesto), como una guerra por la independencia de Alemania y por librar a Francia y a Europa del foco pestilente del Segundo Imperio (p. 43).
Marx que ahora son los obreros alemanes los que piden , y como primera, reconocimiento de la (p. 43), pues se teme que el Gobierno vuelva a colocar a Luis Bonaparte en las (p. 44).
Como ellos, Marx celebra el advenimiento de la en Francia, pero teme al ver que los orleanistas se hacen con el y la , a los que se proclaman republicanos departamentos puramente (p. 44).
clase obrera de Francia tiene que hacer frente a condiciones , dice Marx, y : intento de derribar al nuevo gobierno en el trance actual, con el enemigo casi a las puertas de , una locura (p. 45).
Y, sin embargo, la locura se , e incluso ―como relata Engels (, p. 13)― 31 de octubre los batallones obreros tomaron por asalto el de Ville y capturaron a algunos miembros del . , con el nacimiento de la Comuna se favorecieron notablemente las exigencias de Alemania.
el 9 de septiembre de 1870 por el Consejo General de la Internacional de los Trabajadores.
MANIFIESTO del Consejo General de la Internacional de los Trabajadores sobre la Guerra Civil en Francia en 1871.
I. La mayor parte de este dedicada a relatar antecedentes de los gobernantes de la proclamada en septiembre de 1870. El intento de Marx es demostrar que el advenimiento republicano se debe al esfuerzo de los obreros ( 4 de septiembre de 1870, cuando los obreros de proclamaron la ), siendo otros los que quisieron ( cuadrilla de abogados arribistas, con Thiers como estadista y Trochu como general, se posesionaron del de ) (p. 47).
Son varias las que dedica Marx a describir, en la forma dura y violenta posible, la vida y movimientos de personas como Julio Faure, Ernesto Picard, Arturo Picard, Julio Ferry y, desde luego, los citados Thiers y Trochu, para quienes reserva los peores calificativos. En ocasiones desciende a tan bajos y niveles que hace casi la lectura del .
II. Detalla Marx los inicios del enfrentamiento entre el Gobierno republicano y los que posteriormente la Comuna.
El Gobierno republicano que la Guardia Nacional entregara las armas de de que y que utilizado contra los alemanes. La Guardia Nacional confiado su a un Central, que se a entregarlas en que sido adquiridos por abierta entre la Guardia (p. 63).
de sus estaba destinada, evidentemente, a ser el preludio del desarme general de y, por tanto, del desarme de la del 4 de (p. 63). Con respecto a estas palabras de Marx repetimos lo dicho arriba al comentar el I: Marx intenta siempre demostrar que el Gobierno legal (el que la ) fue el de los obreros de , y que la Asamblea Nacional reunida en Burdeos era una de los contrarrevolucionarios. Esto, sin embargo, no parece quedar muy claro, incluso en el mismo escrito de Marx, con textos como : Asamblea Nacional, con sus plenos poderes para fijar las condiciones de la paz con Prusia ... (p. 64). adelante, Marx acusa a Thiers de haber iniciado la guerra civil (p. 65).
Posteriormente se dedica a demostrar que la proletaria estuvo exenta de los actos de violencia en que tanto abundan las revoluciones (p. 65). No obstante, de la lectura se deduce. que hubo bastante violencia, que Marx trata de explicar debidamente.
da cuenta de las muertes de los generales Lecomte y Thomas, como justificadas por sus actuaciones frente a la clase obrera, y por fin intenta desautorizar, con su de los hechos, supuesta matanza de ciudadanos inermes en la plaza (p. 68).
Dedica a dos a lo que, con referencia a lo tratado, denomina reverso de la (p. 68). Thiers y Gallifet son los duramente atacados.
III. Este tercer dedicado a la de la Comuna de , nacida el 18 de marzo de 1871 (p. 73).
Marx hace su de describir con algunas pinceladas los franceses de gobierno de los siglos (pp. 74‑76). al Segundo Imperio, dice: Imperio, con el golpe de Estado por fe de bautismo, el sufragio universal por y la espada por cetro, declaraba apoyarse entre los (...) su , la sociedad burguesa, libre de preocupaciones , un desarrollo que ni ella misma esperaba. Su industria y su comercio cobraron proporciones gigantescas (...) la miseria de las masas se destacaba sobre la ... (pp. 76‑77).
Marx que la directa del Imperio era la Comuna, ya que no acabar solamente con forma de la de clase, sino con la propia de (p. 77).
La Comuna estaba formada por consejeros municipales elegidos por sufragio universal, responsables y revocables en todo momento. Igual de funcionarios electivos, responsables y revocables, los magistrados y los jueces y todos los restantes funcionarios (p. 79).
Una vez suprimido el permanente (que se por las ) y la , eran los elementos de la fuerza del antiguo gobierno, la Comuna estaba impaciente por destruir la fuerza espiritual de , el 'poder de los curas', decretando la de la Iglesia del Estado y la de todas las iglesias como corporaciones poseedoras. Los curas fueron devueltos al retiro de la vida privada ... (p. 79).
Igual que en hacerse en las provincias, siguiendo a la Comuna modelo (p. 79). Las comunas rurales de cada distrito sus asuntos colectivos por medio de una asamblea de delegados y estas asambleas diputados a la Asamblea Nacional, siendo todos revocables (pp. 79‑80).
Marx afirma seguidamente que la Comuna sido confundida con anteriores ―como las comunas medievales―, o sido juzgada superficialmente, al decirse que era un gobierno barato por suprimir el permanente y, la burocracia del Estado (p. 82). Anotemos de paso esta gran paradoja e de la historia: que alguien pudiera pensar en aquellos momentos que el comunismo no permanente ni burocracia. Precisamente, la de esto son dos de las llamativas de los comunistas, y es justamente la causa de lo onerosos (entre otros males peores) que resultan al pueblo esos gobiernos: el permanente y la omnipresente burocracia estatal.
Y para evitar , Marx : su verdadero secreto: la Comuna era, esencialmente, un gobierno de la clase obrera, fruto de la lucha de la clase productora contra la clase (p. 83). Como sabemos, esta de la se realiza mediante la del , es decir, un de militarismo penetrado de la que el partido comunista, utilizando como elemento de control social una burocracia que a todo llega y todo lo domina.
En de Marx, esa era la forma para llevar a cabo la del , pues es la base sobre la descansa la existencia de clases y, por consiguiente, la de (p. 83). Eliminando la propiedad todos trabajadores (pp. 83‑84). Teniendo conciencia Marx de que toca un punto , : eso es el comunismo! (p. 84).
A hace un ataque contra las cooperativas, que, de no conducir al comunismo, impostura y un (p. 84). Por ser un tratado descriptivo de lo que se hizo o quiso hacer en durante el periodo de la Comuna, y no un tratado sobre el comunismo, Marx no se explaya sobre este concepto ― en su ― de la de la propiedad privada de los medios de , si bien ―como hemos visto: eso es el comunismo! ― lo valora en toda la importancia fundamental que tiene para su sistema.
Incluye ahora Marx algunas pocas frases resaltando el determinismo de su sistema: forma superior de vida hacia la que tiende irresistiblemente la sociedad actual por su propio desarrollo (...), consciente de su (la clase obrera) (p. 85).
Las siguientes son utilizadas por Marx para demostrar, primero a la clase media y a los campesinos , que los gobiernos siempre se han servido de ellos, mientras que la Comuna de les servido. Dice, al campesino: librado de la del guarda jurado, del gendarme y del prefecto; la. por el maestro de escuela hubiera ocupado el lugar del embrutecimiento por el cura ... (p. 87). Alude Marx al internacional de la Comuna y toca el tema de los falsos revolucionarios. de revoluciones , ' etc., un mal inevitable; con el tiempo se les quita de en medio; pero a la Comuna no le fue dado disponer de (pp. 92‑93).
A Marx hace un relato contraponiendo el nuevo , el sin asaltos, trabajador, pensador, etc., al viejo de (y al no revolucionario), donde se da todo lo malo: , toda verdad, y Versalles, todo (p. 94). Lo rotundo de la frase da idea de lo irreal de la .
IV. Se detalla en este el fin de la Comuna de .
Marx narra con una cierta riqueza de detalles los distintos movimientos de Thiers, como jefe del gobierno de Versalles, y de los (por terratenientes), con las provincias, con los alemanes (Bismarck) y con . Trata Marx de demostrar que Thiers tuvo expresiones referidas a que hablaban de y , hasta que vio el momento de asestar el golpe decisivo a la Comuna. afirma que la ayuda de Bismarck fue muy importante, sobre todo con la de los prisioneros bonapartistas, que enseguida eran enviados contra (p. 102).
El 10 de mayo de 1871 fue firmado el Tratado de Paz entre los gobiernos de Bismarck y Thiers, y el 18 del mismo mes fue ratificado por la Asamblea de Versalles. El 21 de mayo las puertas de la (p. 103).
Marx relata la de las tropas vencedoras de la forma despiadada. En su , se establecer un paralelismo con las violencias de los tiempos de Sila y los triunviratos romanos (p. 104).
Y una vez , no obstante describir las cosas teniendo en cuenta sus intenciones que la realidad de los hechos, lleva este a sus consecuencias, con la morbosa de los sentimientos de los lectores, al citar dos en las que se hace un marcado contrapunto entre la guerra, con sus vidas segadas por ametralladoras, etc., con la vida de placer y superficialidad, de sensualidad, que se da en algunos bulevares no implicados en la batalla. Naturalmente, Marx aclara que esta , exclusivamente, la del del (p. 105).
Siguen algunas dedicadas a aclarar las contra la Comuna, encuentran eco en todo el (p. 106). Empieza con la de con que les el gobierno de Versalles. Marx reconoce que el momento del heroico holocausto de mismo, el obrero en llamas edificios y (p. 106), pero lo justifica porque los obreros ya no abrigaban esperanza de en triunfos a los muros intactos de sus (p. 106), porque Comuna se del fuego pura y exclusivamente como de un medio de (p. 107) y porque los actos de los obreros de fueron de vandalismo, era el vandalismo de la defensa , y Marx un nuevo agravio totalmente gratuito a los cristianos, al proseguir: un vandalismo de triunfo, como aquel de que los cristianos dieron prueba al destruir los tesoros , realmente inestimables, de la (p. 108).
Trata el tema de la de los sesenta y cuatro rehenes, con el arzobispo de a la cabeza, al que ya nos hemos referido al exponer el contenido de la de Engels.
Ante lo que considera calumnias contra la Comuna, Marx concluye con un que nos ambienta en el estilo con que Marx toda esta obra, y especialmente este : este coro de calumnias, que el partido del orden, en sus de sangre, no deja nunca de alzar contra sus , demuestra que el de nuestros se considera el heredero del antiguo feudal... (p. 110).
Se refiere al sin de que los gobiernos de Prusia y Francia confraternicen en su lucha contra el proletariado, lo que representa, como cree Bismarck, el aplastamiento definitivo de la nueva sociedad que avanza, sino el desmoronamiento completo de la sociedad (p. 112).
Todos los gobiernos prescinden de la guerra nacional tan pronto como estalla la guerra civil. de clase ya no se puede disfrazar bajo el uniforme nacional; todos los gobiernos nacionales ya son uno solo contra el (p. 112). Sin duda era un momento apropiado para fomentar la unidad internacional del proletariado; sin embargo, la historia la mayor unidad que existe entre personas de distintos estamentos en una misma , en con los de la misma clase de diversos.
A Marx ataca a los gobiernos de Europa porque presentan a la Internacional de los Trabajadores la fuente principal de todos estos (p. 112). Para contrarrestarlo, trae a el testimonio de escritor (al que no cita) y que dice: miembros del Central de la Guardia Nacional, como la mayor parte de los miembros de la comuna, son las cabezas activas, inteligentes y de la Internacional de los Trabajadores. .. (p. 113).
Como puede observarse, de esta forma Marx atribuye todo lo que hizo y fue la Comuna de a la obra de la Internacional a de sus miembros parisinos.
Les dice a los miembros de la que es imposible el exterminio de la misma, a pesar de los esfuerzos que puedan realizarse: hacerlo, los gobiernos que exterminar el despotismo del capital sobre el (p. 113).
Finalmente, una para los que lucharon contra la Comuna: historia los ha clavado ya en una picota eterna, de la que no redimirlos todas las preces de su (p. 114). Una vez aprovecha para atacar a la . Es una constante en Marx.
fechado en Londres el 30 de mayo de 1871.
La guerra civil en Francia
Ediciones Pueblos Unidos. Montevideo (Uruguay), 1954, 121 pp.
(t.o.: in Frankreich)
CONTENIDO DE LA OBRA
se explica en nota a pie del texto, el presente volumen contiene las traducciones del folleto de 1871 ―cotejadas con la alemana de 1891― del Manifiesto del Consejo General de la Internacional de los Trabajadores sobre la Guerra Civil de 1871 en Francia, redactado por Marx, y complementado con un par de cortas y una carta publicada en la prensa. Incluye asimismo otros dos manifiestos del Consejo General de la Internacional de los Trabajadores, redactados por Marx, y una General de Engels escrita en 1891, aniversario de la Comuna de , para la de Guerra Civil en , publicada en en ese mismo .
DEL VOLUMEN
― de Engels, p. 7.
― Primer Manifiesto del Consejo General de la Internacional de los Trabajadores sobre la guerra francoprusiana, p. 27.
― Segundo Manifiesto del Consejo General de la Internacional de los Trabajadores sobre la guerra francoprusiana, p. 35.
― Manifiesto del Consejo General de la Internacional de los Trabajadores sobre la Guerra Civil en Francia en 1871, p. 47; I, p. 47; II, p. 62; III, p. 73; IV, p. 96; , p. 115.
DE ENGELS
En primer lugar explica por en la alemana de 1891 (ocurre lo mismo en la presente ) se incluyen los dos manifiestos, cortos, del Consejo General de, la Internacional de los Trabajadores sobre la guerra franco‑prusiana, precediendo al referente a La Guerra Civil en Francia. Dice que en La Guerra Civil se hace referencia al segundo de estos manifiestos, que, a su vez, no puede ser completamente comprendido sin conocer el primero (p. 7).
Tras dos breves alusiones a la internacional de Francia y Alemania, afirma: que estemos obligados a poner al alcance de los obreros alemanes estos brillantes documentos, hoy medio olvidados, de la profunda de la internacional de la clase obrera en (p. 9). (Recordamos que estos documentos fueron redactados, todos ellos, por Marx.)
El 28 de mayo de 1871 los luchadores de la Comuna; , el 30, Marx ya al Consejo General el texto del trabajo en que se esboza la de la Comuna de (p. 9).
En de Engels, gracias al desarrollo y de Francia desde 1789, la en desde hace cincuenta sido tal que no estallar en esta ciudad ninguna que no asumiese en seguida un (p. 9). por primera vez en (p. 10). Las discordias internas de la permitieron a Luis Bonaparte apoderarse de todos los puestos de mando, haciendo saltar la Asamblea Nacional el 2 de diciembre de 1851, comenzando el Segundo Imperio, de Francia por una cuadrilla de aventureros y financieros, pero , al mismo tiempo, un desarrollo industrial como hubiera podido concebirse bajo el sistema mezquino y asustadizo de Luis (p. 11).
Pero el Segundo Imperio era la de las fronteras del Primer Imperio, perdidas en 1814, o al menos las de la Primera , y nada deslumbraba a estos franceses que las tierras alemanas de la orilla izquierda del Rin. Proclamado el Segundo Imperio, la de este territorio simplemente una de tiempo. Y el tiempo con la guerra austro‑prusiana de . Defraudado en sus esperanzas de (p. 12), no le quedaba ahora salida que la guerra, que en 1870 y le primero a y a (p. 12). El 2 de septiembre de 1870, en , el fue derrotado y hecho prisionero, junto con el emperador. III fue internado en , cerca de Cassel.
Sigue una de Engels en la que se muestra decididamente su determinismo : consecuencia inevitable fue la de del 4 de septiembre de 1870. El Imperio se y nuevamente fue proclamada la . Pero el enemigo ―en este caso los alemanes― estaba a las puertas. Los del Imperio se encontraban sitiados en Metz, sin esperanza de , o prisioneros en Alemania. Los diputados parisinos del antiguo Cuerpo Legislativo se constituyeron en un Gobierno de Defensa Nacional. los parisinos capaces de las armas se enrolado en la Guardia Nacional y estaban armados, con lo cual los obreros representaban dentro de ella una gran . Pero el antagonismo entre el gobierno, formado casi exclusivamente por burgueses, y el proletariado en armas no en (p. 13), hasta tal punto que 31 de octubre de 1870 los batallones obreros tomaron por asalto el de Ville y capturaron a algunos miembros del (p. 13). Sin embargo, el 28 de enero de 1871 la ciudad de frente a los alemanes. Pero la Guardia Nacional sus armas y sus y se ―afirma Engels a sellar un armisticio con los vencedores, que ocuparon una zona de la ciudad (p. 14).
Thiers, nuevo jefe de gobierno, desarmar a la Guardia Nacional. El intento no . se para la resistencia (...) y se la guerra entre y el gobierno‑, instalado en (p. 14). El 26 de marzo fue elegida, y el 28 proclamada, la Comuna de . El Central de la Guardia Nacional, que hasta entonces tenido el poder en sus manos, en favor de la Comuna.
Engels describe a los primeros de de la Comuna: 30, la Comuna el servicio militar obligatorio y el permanente y fuerza armada a la Guardia Nacional, en la que enrolarse todos los ciudadanos capaces de las (p. 15). los pagos de alquiler de viviendas. El mismo 30 fueron confirmados en sus cargos los extranjeros elegidos para la Comuna, pues bandera de la Comuna es la bandera de la (p. 15). El 1 se acordaron los sueldos de los funcionarios de la Comuna. siguiente se la de la Iglesia y el Estado y la de todas las partidas consignadas en el presupuesto del Estado para fines religiosos, declarando propiedad nacional todos los bienes de la Iglesia; como consecuencia de esto, el 8 de abril se que se eliminasen de las escuelas todos los religiosos, , dogmas, oraciones; en una palabra, todo lo que cae dentro de la de la conciencia (p. 15). El 5 un decreto ordenando la de rehenes, pero esta nunca se a la (p. 15). Hay una curiosa con lo expresado dos adelante: las negociaciones, abiertas a propuesta de la Comuna, para canjear al arzobispo de y a toda una serie de , presos en la capital como rehenes ... , y con lo que dice Marx en el IV de Guerra Civil en : la por la Comuna de los sesenta y cuatro rehenes, con el arzobispo de a la cabeza? (p. 109). ... Comuna, para proteger sus vidas, viose obligada a recurrir a la prusiana de tomar (p. 109).
El 16 de abril se la apertura de un registro de las clausuradas por los patronos y la de planes para ser explotadas directamente por los obreros en forma cooperativa, formando con todas ellas una gran . El 30 de abril se la clausura de las casas de . El 16 de mayo fue demolida la columna de la , de (p. 16), como sido decidido el 12 de abril.
Sin embargo, afirma Engels, en una ciudad sitiada lo que se alcanzar era un comienzo de desarrollo de todas estas medidas. los primeros de mayo, la lucha contra los levantados por el Gobierno de Versalles, cada vez nutridos, todas las (p. 17). 21, gracias a una y por culpa del descuido de los guardias nacionales destacados en este sector, consiguieron (los versalleses) abrirse paso hacia el interior de la (p. 18).
A partir de este , Engels expone algunas ideas que considera deben sacarse como experiencia de aquellos acontecimientos. hoy, al cabo de veinte , volvemos los ojos a las actividades y a la de la Comuna de de 1871, advertimos la necesidad de completar un poco la que se hace en Guerra Civil en ... Los miembros de la Comuna estaban divididos en una integrada por los (p. 19) y compuesta por afiliados a la Internacional de los Trabajadores, entre los que los adeptos de la escuela socialista de (p. 19).
A , Engels critica severamente a los de los marxistas en la Comuna, proudhonianos y blanquistas. a los proudhonianos la principal responsabilidad por los decretos de la (p. 20); los blanquistas les incumbe la responsabilidad principal por los actos y las omisiones (p. 20). , en ambos casos, la de la historia quiso ―como acontece generalmente cuando el Poder cae en manos de doctrinarios― que tanto unos como otros hiciesen lo contrario de lo que la doctrina de su escuela respectiva (p. 20).
, el socialista de los campesinos y maestros artesanos, odiaba positivamente la (p. 20). Sin embargo, el decreto importante de cuantos la Comuna una que no se basaba en la del obrero dentro de cada , sino que unificar a todas estas asociaciones en una gran ; en resumen, en una que, como Marx dice muy bien en Guerra , forzosamente conducido en instancia al (p. 21). La idea expuesta por Engels ―los sindicatos llevan necesariamente al comunismo― es hoy totalmente indefendible. Lo que se puede aceptar ―y los hechos lo atestiguan― es que los sindicatos dirigidos por comunistas tienen como principal servirse de ellos como fuerza con vistas a acabar en el Poder e imponer el comunismo.
Engels poco : eso la Comuna fue la tumba de la escuela proudhoniana del (p. 21). fue mejor la suerte que corrieron los (p. 21). en la escuela de la y mantenidos en por la disciplina que esta escuela (p. 21), los blanquistas de la idea de que un grupo dominarlos a todos. llevaba consigo la y dictatorial de todos los poderes en manos del nuevo Gobierno (p. 22). Sin embargo, Comuna tuvo que reconocer desde el primer momento que la clase obrera, al llegar al Poder (...), tiene, de una parte, que barrer toda la vieja represiva utilizada hasta entonces contra ella, y, de otra parte, precaverse contra sus propios diputados y funcionarios, a todos, sin , revocables en cualquier (p. 22). todos los cargos administrativos, judiciales y de por , mediante sufragio universal, concediendo a los electores el derecho a revocar en todo momento a sus elegidos (p. 24).
Se trasluce la desconfianza de los marxistas para todos, para los propios . Comprendemos que esta mentalidad, llevada hasta sus consecuencias, significa el Estado policiaco, en el que todos vigilan a todos.
Finalmente, Engels se refiere a la del Estado en la sociedad socialista. Es un punto al que concede mucha relevancia. la , el Estado es la ' de la idea', o sea, traducido al lenguaje , el reino de Dios sobre la tierra, el campo en que se hacen o deben hacerse realidad la eterna verdad y la eterna justicia. De nace una supersticiosa del Estado y de todo lo que con se relaciona (...), y se cree haber dado un paso enormemente audaz con librarse de la fe en la hereditaria y entusiasmarse por la . En realidad, el Estado no es que una para la de una clase por (pp. 24‑25).
proletariado victorioso, lo mismo que hizo la Comuna, no por menos que amputar inmediatamente los lados peores de este mal (dictadura del proletariado) entre tanto que una futura, educada en condiciones sociales nuevas y libres, pueda deshacerse de todo ese trasto viejo del (p. 25). En pocas frases queda expuesta la marxista: dictadura del proletariado (con todo lo violenta, sangrienta y liberticida que esta dictadura ha sido y es en los donde se ha entronizado el marxismo) a la espera del estadio comunista en que el Estado desaparecido. Hoy, muchos de la de octubre en , comprobamos que esas generaciones futuras marxistas, lejos de abandonar ese viejo del , lo fortalecen, lo en sus atribuciones (siempre en perjuicio de la persona y de la libertad) y, en palabras de Engels, veneran cada vez .
PRIMER MANIFIESTO del Consejo General de la Internacional de los Trabajadores sobre la guerra francoprusiana.
Los obreros deben estar unidos y colaborar entre , por encima de las discordias y guerras nacionales (p. 27).
Esa es la idea que Marx, que desarrollar, intenta grabar. Para ello utiliza principalmente varios textos de resoluciones obreras.
El 19 de julio de 1870 la guerra franco‑prusiana. Con anterioridad, miembros parisinos de la Internacional puesto de nuevo manos a la (p. 29). En de 12 de julio , entre otras cosas: vez , bajo el pretexto del equilibrio europeo y del honor nacional, la paz del mundo se ve amenazada por las ambiciones . de Francia, de Alemania, de ! nuestras voces en un grito de contra la guerra! ... (pp. 29‑30).
la clase obrera alemana permite que la guerra actual pierda su estrictamente defensivo y degenere en una guerra contra el pueblo , el triunfo o la derrota igualmente (p. 32). los principios de la Internacional se hallan demasiado difundidos y demasiado firmemente arraigados entre la clase obrera alemana para tener atan lamentable (p 32). (El subrayado es nuestro.)
Y Marx, para fundamentar la anterior , que una asamblea celebrada en Brunswick el 16 de julio tele 1870 su absoluta solidaridad con el Manifiesto de y asimismo: enemigos de todas las guerras, pero sobre todo de las guerras ... (p. 32).
Hubo declaraciones similares en Chemnitz y , se expresa en este Manifiesto, del que se saca la que la clase obrera alemana la guerra ofensiva: tal es el de la clase obrera alemana, como parece desprenderse de este Manifiesto.
Marx hace una llamada de con respecto a Rusia: fondo de esta lucha suicida se alza la figura siniestra de (p. 33).
clase obrera inglesa tiende su mano fraternal a los obreros de Francia y Alemania (...), la alianza de los obreros de todos los por liquidar las guerras (...), surgiendo una sociedad nueva, cuyo principio de internacional la paz, porque el gobernante nacional el mismo en todos los : el trabajo. La precursora de esta sociedad nueva es la Internacional de los Trabajadores. Londres (23 de julio de 1870) (p. 34).
No resulta encuadrar estas afirmaciones con la lucha de clases.
SEGUNDO MANIFIESTO del Consejo General de la Internacional de los Trabajadores sobre la guerra franco‑prusiana.
Comienza Marx afirmando que si no se equivocaba (en el primer Manifiesto) al predecir el fin del Segundo Imperio, le faltaba al temer que la guerra alemana perdiese su estrictamente defensivo y degenerase en una guerra contra el pueblo (p. 34).
A demostrar el ofensivo de esta guerra dedicado este Manifiesto. Marx, sin embargo, no reconoce la derrota de la Internacional en su intento de evitar que la guerra se convirtiese en una guerra ofensiva contra el pueblo . En el primer Manifiesto ―como hemos visto― se daba casi como un hecho el de la obrera , enalteciendo el supuesto internacionalista de los obreros de los en conflicto, que una guerra contra el pueblo (cfr. p. 32). Sin embargo, nada de esto se cumple y los obreros de cada forman junto a sus connacionales en la empresa guerrera.
Veremos a intenta Marx justificar lo anterior, trasladando toda la a un campo tan lejano de los obreros alemanes, que resulta compaginarlo con el papel tan relevante que les daba en el primer Manifiesto.
su discurso de la Corona ante la Dieta de la Alemania del Norte, el rey declarado solemnemente que la guerra iba contra el emperador de Francia y no contra el pueblo (p. 36). eximirle de este compromiso solemne? Los directores de escena que presentarle como accediendo de mala gana a los mandatos irresistibles del pueblo (p. 37). los patriotas astutos reclaman Alsacia y la parte de la Lorena que habla , como una material contra las agresiones (p. 38).
Expresa Marx a que el sistema de nunca para evitar ataques de las naciones, lo que significa que, bajo esa capa, Alemania estaba aplicando una de (p. 40).
La clase obrera alemana ha apoyado la guerra, que no estaba en su mano impedir (clara con el primer Manifiesto), como una guerra por la independencia de Alemania y por librar a Francia y a Europa del foco pestilente del Segundo Imperio (p. 43).
Marx que ahora son los obreros alemanes los que piden , y como primera, reconocimiento de la (p. 43), pues se teme que el Gobierno vuelva a colocar a Luis Bonaparte en las (p. 44).
Como ellos, Marx celebra el advenimiento de la en Francia, pero teme al ver que los orleanistas se hacen con el y la , a los que se proclaman republicanos departamentos puramente (p. 44).
clase obrera de Francia tiene que hacer frente a condiciones , dice Marx, y : intento de derribar al nuevo gobierno en el trance actual, con el enemigo casi a las puertas de , una locura (p. 45).
Y, sin embargo, la locura se , e incluso ―como relata Engels (, p. 13)― 31 de octubre los batallones obreros tomaron por asalto el de Ville y capturaron a algunos miembros del . , con el nacimiento de la Comuna se favorecieron notablemente las exigencias de Alemania.
el 9 de septiembre de 1870 por el Consejo General de la Internacional de los Trabajadores.
MANIFIESTO del Consejo General de la Internacional de los Trabajadores sobre la Guerra Civil en Francia en 1871.
I. La mayor parte de este dedicada a relatar antecedentes de los gobernantes de la proclamada en septiembre de 1870. El intento de Marx es demostrar que el advenimiento republicano se debe al esfuerzo de los obreros ( 4 de septiembre de 1870, cuando los obreros de proclamaron la ), siendo otros los que quisieron ( cuadrilla de abogados arribistas, con Thiers como estadista y Trochu como general, se posesionaron del de ) (p. 47).
Son varias las que dedica Marx a describir, en la forma dura y violenta posible, la vida y movimientos de personas como Julio Faure, Ernesto Picard, Arturo Picard, Julio Ferry y, desde luego, los citados Thiers y Trochu, para quienes reserva los peores calificativos. En ocasiones desciende a tan bajos y niveles que hace casi la lectura del .
II. Detalla Marx los inicios del enfrentamiento entre el Gobierno republicano y los que posteriormente la Comuna.
El Gobierno republicano que la Guardia Nacional entregara las armas de de que y que utilizado contra los alemanes. La Guardia Nacional confiado su a un Central, que se a entregarlas en que sido adquiridos por abierta entre la Guardia (p. 63).
de sus estaba destinada, evidentemente, a ser el preludio del desarme general de y, por tanto, del desarme de la del 4 de (p. 63). Con respecto a estas palabras de Marx repetimos lo dicho arriba al comentar el I: Marx intenta siempre demostrar que el Gobierno legal (el que la ) fue el de los obreros de , y que la Asamblea Nacional reunida en Burdeos era una de los contrarrevolucionarios. Esto, sin embargo, no parece quedar muy claro, incluso en el mismo escrito de Marx, con textos como : Asamblea Nacional, con sus plenos poderes para fijar las condiciones de la paz con Prusia ... (p. 64). adelante, Marx acusa a Thiers de haber iniciado la guerra civil (p. 65).
Posteriormente se dedica a demostrar que la proletaria estuvo exenta de los actos de violencia en que tanto abundan las revoluciones (p. 65). No obstante, de la lectura se deduce. que hubo bastante violencia, que Marx trata de explicar debidamente.
da cuenta de las muertes de los generales Lecomte y Thomas, como justificadas por sus actuaciones frente a la clase obrera, y por fin intenta desautorizar, con su de los hechos, supuesta matanza de ciudadanos inermes en la plaza (p. 68).
Dedica a dos a lo que, con referencia a lo tratado, denomina reverso de la (p. 68). Thiers y Gallifet son los duramente atacados.
III. Este tercer dedicado a la de la Comuna de , nacida el 18 de marzo de 1871 (p. 73).
Marx hace su de describir con algunas pinceladas los franceses de gobierno de los siglos (pp. 74‑76). al Segundo Imperio, dice: Imperio, con el golpe de Estado por fe de bautismo, el sufragio universal por y la espada por cetro, declaraba apoyarse entre los (...) su , la sociedad burguesa, libre de preocupaciones , un desarrollo que ni ella misma esperaba. Su industria y su comercio cobraron proporciones gigantescas (...) la miseria de las masas se destacaba sobre la ... (pp. 76‑77).
Marx que la directa del Imperio era la Comuna, ya que no acabar solamente con forma de la de clase, sino con la propia de (p. 77).
La Comuna estaba formada por consejeros municipales elegidos por sufragio universal, responsables y revocables en todo momento. Igual de funcionarios electivos, responsables y revocables, los magistrados y los jueces y todos los restantes funcionarios (p. 79).
Una vez suprimido el permanente (que se por las ) y la , eran los elementos de la fuerza del antiguo gobierno, la Comuna estaba impaciente por destruir la fuerza espiritual de , el 'poder de los curas', decretando la de la Iglesia del Estado y la de todas las iglesias como corporaciones poseedoras. Los curas fueron devueltos al retiro de la vida privada ... (p. 79).
Igual que en hacerse en las provincias, siguiendo a la Comuna modelo (p. 79). Las comunas rurales de cada distrito sus asuntos colectivos por medio de una asamblea de delegados y estas asambleas diputados a la Asamblea Nacional, siendo todos revocables (pp. 79‑80).
Marx afirma seguidamente que la Comuna sido confundida con anteriores ―como las comunas medievales―, o sido juzgada superficialmente, al decirse que era un gobierno barato por suprimir el permanente y, la burocracia del Estado (p. 82). Anotemos de paso esta gran paradoja e de la historia: que alguien pudiera pensar en aquellos momentos que el comunismo no permanente ni burocracia. Precisamente, la de esto son dos de las llamativas de los comunistas, y es justamente la causa de lo onerosos (entre otros males peores) que resultan al pueblo esos gobiernos: el permanente y la omnipresente burocracia estatal.
Y para evitar , Marx : su verdadero secreto: la Comuna era, esencialmente, un gobierno de la clase obrera, fruto de la lucha de la clase productora contra la clase (p. 83). Como sabemos, esta de la se realiza mediante la del , es decir, un de militarismo penetrado de la que el partido comunista, utilizando como elemento de control social una burocracia que a todo llega y todo lo domina.
En de Marx, esa era la forma para llevar a cabo la del , pues es la base sobre la descansa la existencia de clases y, por consiguiente, la de (p. 83). Eliminando la propiedad todos trabajadores (pp. 83‑84). Teniendo conciencia Marx de que toca un punto , : eso es el comunismo! (p. 84).
A hace un ataque contra las cooperativas, que, de no conducir al comunismo, impostura y un (p. 84). Por ser un tratado descriptivo de lo que se hizo o quiso hacer en durante el periodo de la Comuna, y no un tratado sobre el comunismo, Marx no se explaya sobre este concepto ― en su ― de la de la propiedad privada de los medios de , si bien ―como hemos visto: eso es el comunismo! ― lo valora en toda la importancia fundamental que tiene para su sistema.
Incluye ahora Marx algunas pocas frases resaltando el determinismo de su sistema: forma superior de vida hacia la que tiende irresistiblemente la sociedad actual por su propio desarrollo (...), consciente de su (la clase obrera) (p. 85).
Las siguientes son utilizadas por Marx para demostrar, primero a la clase media y a los campesinos , que los gobiernos siempre se han servido de ellos, mientras que la Comuna de les servido. Dice, al campesino: librado de la del guarda jurado, del gendarme y del prefecto; la. por el maestro de escuela hubiera ocupado el lugar del embrutecimiento por el cura ... (p. 87). Alude Marx al internacional de la Comuna y toca el tema de los falsos revolucionarios. de revoluciones , ' etc., un mal inevitable; con el tiempo se les quita de en medio; pero a la Comuna no le fue dado disponer de (pp. 92‑93).
A Marx hace un relato contraponiendo el nuevo , el sin asaltos, trabajador, pensador, etc., al viejo de (y al no revolucionario), donde se da todo lo malo: , toda verdad, y Versalles, todo (p. 94). Lo rotundo de la frase da idea de lo irreal de la .
IV. Se detalla en este el fin de la Comuna de .
Marx narra con una cierta riqueza de detalles los distintos movimientos de Thiers, como jefe del gobierno de Versalles, y de los (por terratenientes), con las provincias, con los alemanes (Bismarck) y con . Trata Marx de demostrar que Thiers tuvo expresiones referidas a que hablaban de y , hasta que vio el momento de asestar el golpe decisivo a la Comuna. afirma que la ayuda de Bismarck fue muy importante, sobre todo con la de los prisioneros bonapartistas, que enseguida eran enviados contra (p. 102).
El 10 de mayo de 1871 fue firmado el Tratado de Paz entre los gobiernos de Bismarck y Thiers, y el 18 del mismo mes fue ratificado por la Asamblea de Versalles. El 21 de mayo las puertas de la (p. 103).
Marx relata la de las tropas vencedoras de la forma despiadada. En su , se establecer un paralelismo con las violencias de los tiempos de Sila y los triunviratos romanos (p. 104).
Y una vez , no obstante describir las cosas teniendo en cuenta sus intenciones que la realidad de los hechos, lleva este a sus consecuencias, con la morbosa de los sentimientos de los lectores, al citar dos en las que se hace un marcado contrapunto entre la guerra, con sus vidas segadas por ametralladoras, etc., con la vida de placer y superficialidad, de sensualidad, que se da en algunos bulevares no implicados en la batalla. Naturalmente, Marx aclara que esta , exclusivamente, la del del (p. 105).
Siguen algunas dedicadas a aclarar las contra la Comuna, encuentran eco en todo el (p. 106). Empieza con la de con que les el gobierno de Versalles. Marx reconoce que el momento del heroico holocausto de mismo, el obrero en llamas edificios y (p. 106), pero lo justifica porque los obreros ya no abrigaban esperanza de en triunfos a los muros intactos de sus (p. 106), porque Comuna se del fuego pura y exclusivamente como de un medio de (p. 107) y porque los actos de los obreros de fueron de vandalismo, era el vandalismo de la defensa , y Marx un nuevo agravio totalmente gratuito a los cristianos, al proseguir: un vandalismo de triunfo, como aquel de que los cristianos dieron prueba al destruir los tesoros , realmente inestimables, de la (p. 108).
Trata el tema de la de los sesenta y cuatro rehenes, con el arzobispo de a la cabeza, al que ya nos hemos referido al exponer el contenido de la de Engels.
Ante lo que considera calumnias contra la Comuna, Marx concluye con un que nos ambienta en el estilo con que Marx toda esta obra, y especialmente este : este coro de calumnias, que el partido del orden, en sus de sangre, no deja nunca de alzar contra sus , demuestra que el de nuestros se considera el heredero del antiguo feudal... (p. 110).
Se refiere al sin de que los gobiernos de Prusia y Francia confraternicen en su lucha contra el proletariado, lo que representa, como cree Bismarck, el aplastamiento definitivo de la nueva sociedad que avanza, sino el desmoronamiento completo de la sociedad (p. 112).
Todos los gobiernos prescinden de la guerra nacional tan pronto como estalla la guerra civil. de clase ya no se puede disfrazar bajo el uniforme nacional; todos los gobiernos nacionales ya son uno solo contra el (p. 112). Sin duda era un momento apropiado para fomentar la unidad internacional del proletariado; sin embargo, la historia la mayor unidad que existe entre personas de distintos estamentos en una misma , en con los de la misma clase de diversos.
A Marx ataca a los gobiernos de Europa porque presentan a la Internacional de los Trabajadores la fuente principal de todos estos (p. 112). Para contrarrestarlo, trae a el testimonio de escritor (al que no cita) y que dice: miembros del Central de la Guardia Nacional, como la mayor parte de los miembros de la comuna, son las cabezas activas, inteligentes y de la Internacional de los Trabajadores. .. (p. 113).
Como puede observarse, de esta forma Marx atribuye todo lo que hizo y fue la Comuna de a la obra de la Internacional a de sus miembros parisinos.
Les dice a los miembros de la que es imposible el exterminio de la misma, a pesar de los esfuerzos que puedan realizarse: hacerlo, los gobiernos que exterminar el despotismo del capital sobre el (p. 113).
Finalmente, una para los que lucharon contra la Comuna: historia los ha clavado ya en una picota eterna, de la que no redimirlos todas las preces de su (p. 114). Una vez aprovecha para atacar a la . Es una constante en Marx.
fechado en Londres el 30 de mayo de 1871.